Adiós 2010, Bye, bye...

El 2010 ha sido un año difícil, supongo que mucha gente lo calificará como malo pero no me gusta esa palabra, tengo una familia que me quiere y me apoya, amigos, un techo bajo el que cobijarme, comida que llevarme a la boca, no podría decir que el año ha sido malo teniendo todo esto y sabiendo que hay muchísima gente que tiene mucho menos. No negaré que ha sido un año de muchas dificultades pero pese a todo eso, o precisamente gracias a eso, he dejado el pesimismo atrás, ha formado parte de mi vida durante 27 años y no lo quiero más conmigo, no sirve de nada, hay una parte de mi a la que le cuesta deshacerse de él pero estoy aprendiendo, sigo aprendiendo y eso es un gran paso. Voy dejando atrás el odio, la envidia, la autocompasión y el anti comformismo. Siempre pensé que conformarse era de tontos, ¿para qué conformarse con lo que se tiene si se puede aspirar a más? he aprendido que no se trata de eso, hay que luchar por lo que uno quiere y perseguir tus sueños pero siempre dando gracias por lo que se tiene, conformismo es igual a adaptación, me adapto a lo que tengo, lo acepto, lo valoro y doy gracias por ello.
He este año he aprendido, gracias a que las cosas no han sido fáciles, a valorar lo que tengo en lugar de estar pensando en lo que no tengo. El yoga y la meditación han supuesto un grandísimo cambio en mi vida, he aprendido que las dificultades y los retos que se nos presentan en la vida son una manera de volvernos más fuertes, de aprender, de superarnos, no podemos cambiar los obstáculos que se nos presentan en la vida pero sí podemos cambiar la manera en la que nos los tomamos, podemos hundirnos y pensar "¿por qué me pasa esto a mí?" o pensar "esto es solo un bache en el camino que me enseñará a ser más fuerte y a saber mejor como manejarlo la próxima vez que me pase, voy a superarlo". Evidentemente que no es fácil, si lo fuera no tendría sentido, hay que pasar malas épocas para saber apreciar las buenas, hay que conocer la tristeza para valorar la alegría, hay que conocer el llanto para valorar la risa, hay que conocer el fracaso para valorar el éxito, al igual que un niño ha de caerse varias veces para poder aprender a caminar, si se rindiera a la primera caída ¡nunca aprendería a caminar!, si creyera que va a caer cada vez que intenta caminar ¡nunca se levantaría! Hay que levantarse, siempre hay que volver a levantarse porque la vida es maravillosa, tú puedes hacerla maravillosa si así lo decides.

Por todo esto quiero darle las gracias al 2010, porque me he caído, muchas, muchas veces, y he llorado, y he sufrido, y me he hundido y he tocado fondo, pero a veces hay que tocar fondo para darse impulso y subir a la superficie.

Y recordad siempre lo que dijo el Dalai Lama: a veces no conseguir lo que deseas puede ser un maravilloso golpe de suerte.

Adiós 2010, Bye, bye...y gracias, muchas Gracias



Os deseo a todas un muy feliz año nuevo lleno de alegrías, fuerza, salud, paz, perdón, compasión y mucho amor.

Con cariño,

Estefanía